Hoy adelantamos un poco nuestro post semanal ya que se trata de un día especial, hoy se celebra la festividad de la Virgen del Carmen, una de las muchas advocaciones marianas, patrona de los marineros e intercesora de las almas en el purgatorio.
Durante el mes de julio, sendas han sido las actividades organizadas en torno a esta advocación mariana de la Virgen del Carmen en nuestra ciudad.
Llegó el gran día para los devotos carmelitas, hoy 16 de julio la imagen de la Virgen del Carmen, Niño Jesús de Praga y San Juan de la Cruz saldrá en Procesión por la calles de la ciudad. La procesión tiene prevista su salida a las 21:15h desde la Iglesia San Miguel de Úbeda.
Y llegados a este punto os preguntaréis… ¿Qué relación existe entre la Virgen del Carmen y San Juan de la Cruz? Continúa leyendo que te lo explicamos a continuación.
Su denominación proviene del Monte Carmelo situado en Israel, en la ciudad de Haifa, un nombre que deriva de Karmel (significa “Jardín”) o Al-Karem; monte al que se retira un grupo de ermitaños movidos a seguir la figura del Profeta Elías, consagrando pues su vida a Dios y a la virgen María.
El proceso de transformación del grupo hacia una Orden Religiosa se produce con la aprobación de la Regla (Conjunto de preceptos fundamentales que debe observar una orden religiosa por Inocencio IV en el 1247 y según la tradición carmelita, el 16 de julio de 1251, la imagen de la Virgen del Carmen se apareció a San Simón Stock, superior general de la Orden, a quien le entregó sus hábitos y el escapulario, principal signo del culto mariano carmelita. Según esa tradición moderna, la Virgen prometió liberar del Purgatorio a todas las almas que hayan vestido el escapulario durante su vida, el sábado siguiente a la muerte de la persona y llevarlos al cielo.
Esta veneración recibió reconocimiento papal en 1587 y ha sido respaldada por los Pontífices posteriores, en especial lo referente al escapulario.
Bien pronto se multiplicaron y con el tiempo llegaron también mujeres, que desde 1452 inician la rama femenina de los Carmelitas.
Pero en los siglos XV-XVI hubo cierto relajamiento en diversas comunidades, lo que llevó a profundas remodelaciones de la Orden, destacando la promulgada por Santa Teresa de Jesús para la sección femenina y después se hizo lo propio con los religiosos, ayudada por San Juan de la Cruz y el P. Jerónimo Gracián.
En el 1592, esta reforma, llamada de los «Carmelitas Descalzos» o «Teresianos» se hizo independiente de la Orden Carmelita y tuvo un gran desarrollo en las dos Congregaciones de España e Italia, reunidas después en el 1875.
Se tienen así dos Órdenes del Carmelo: la de «Los Carmelitas», llamados también de la «Antigua Observancia» o «Calzados», y la de «Los Carmelitas Descalzos» o «Teresianos», que consideran a Santa Teresa de Jesús como su reformadora y fundadora.
A pesar de esta división, en los siglos sucesivos, la Orden Carmelita, continuó su camino espiritual, llegando hasta nuestros días fieles a “vivir en obsequio de Jesucristo y servirlo fielmente con corazón puro y buena conciencia».
¿Os animáis a conocer más esta Orden?
En nuestra ciudad tenemos tanto la sección femenina (conocidísima por sus dulces caseros, el Torno de Monjas el cual lo encontrarás en la Calle Montiel, donde podrás disfrutar de sus famosos trocitos de cielo listos para llevar), como la masculina (en la que encontrarás el Museo San Juan de la Cruz, de obligada visita por su Oratorio, lugar donde falleció fray Juan).
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